Gerardo Lebredo Zarragoitia
Máster en Ciencias Pedagógicas*
Alcanzar la maestría en ajedrez, además de la obtención de un título nacional o internacional competitivo, se corresponde con hacer progresos significativos en su conocimiento y dominio.
Al margen del talento para enfrentarse a las partidas de torneo y el control emocional para desenvolverse en las lides ajedrecísticas, -aspecto éste relevante en función de los buenos resultados- se pueden constatar avances cuando somos capaces de comprender el desempeño de los mejores sobre el tablero.
En estos propósitos de superación, que podríamos llamar aproximación a la maestría, es fundamental ante todo el conocimiento y dominio de generalidades relevantes.
Los principios esenciales para la práctica del ajedrez: son de gran utilidad en el conocimiento y dominio de aspectos importantes para desarrollarse en esta disciplina deportiva, pues tratan sobre regularidades siempre presentes en el juego o partida.
Válidos en la generalidad de las posiciones, los dominios de estos principios permiten al ajedrecista orientarse durante las diferentes fases del juego: Apertura, Medio Juego y Final, contribuyendo sensiblemente en el aprendizaje y el entrenamiento de esta carismática disciplina, todo lo cual es vital para aproximarse a la ansiada Maestría.
Todo el misterio del ajedrez se encierra en la relación entre los componentes de la posición: el espacio (tablero), la fuerza o material (piezas) y el tiempo u oportunidad de jugar (jugada), así la relación dialéctica entre el todo y sus partes rige su desarrollo y define el resultado.
Jugar bien al ajedrez no es más que conciliar adecuadamente en cada oportunidad o jugada la relación espacio, fuerza y tiempo en función de la posición, proceso en el que la aplicación de regularidades de carácter general, apoyará la labor del practicante facilitando su comprensión de los acontecimientos en el tablero y su actuación consecuente en la toma de las decisiones.
Estos principios generales para la práctica del ajedrez son los siguientes:
-La lucha por el espacio.
-La importancia de la iniciativa.
-Los cambios y la simplificación.
-La economía de recursos en la defensa.
-La armonía como ideal del juego.
Ellos constituyen para los pedagogos: profesores y entrenadores de esta materia, una valiosa herramienta metodológica en su labor.
El conocimiento y dominio de los principios enunciados, su puesta en práctica consciente y sistemática, se expresa en los siguientes atributos:
– Un pensamiento científico.
– Una valoración más plena y fluida de la posición.
Pero también define con nitidez objetivos concretos para el practicante del ajedrez en la lucha sobre el tablero:
• Luchar por obtener ventaja en espacio desde el inicio de la partida de ajedrez.
• Convertir el mejor desarrollo y la ventaja en tiempo en iniciativa.
• Mantener la posición fuerte, con un mínimo de debilidades, en función de la defensa.
• Decidir qué cambios de piezas hacer durante la partida de ajedrez, en función de una valoración integral de la posición.
• Cuidar de la adecuada interacción de todas las piezas entre sí y de su participación en la lucha, durante toda la partida de ajedrez.
Estos y otros aspectos relacionados, se explican coherentemente en el libro (ebook):
Una lectura de gran utilidad para atletas, profesores y entrenadores del llamado juego ciencia, que incluye numerosos ejemplos en posiciones y partidas de estudio.
| Serie: Educación Colección: Ajedrez Autor: Gerardo Lebredo Zarragoitia Tipología: Ebook Soporte: Online Idiomas: Español Compre este productos en: |
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Maestro Internacional de Ajedrez, Entrenador de la FIDE
